El faro de San Juan se encuentra en la Punta del Castillo de la península de Nieva, en la Margen derecha de la salida al mar de la Ría de Avilés.
Se libró al servicio el 31 de agosto de 1863.
El primitivo edificio era de planta casi cuadrada rematando esquinas y puertas con sillería y estando el resto de la fachada pintada de color blanco. La cubierta era de cuatros aguas y de teja roja. Las características actuales del edificio principal, son prácticamente iguales a las originales. La torre adosada a su cara norte es la original con alguna reforma, Consta de dos cuerpos, diferenciados arquitectónicamente, el primero, el cual llega hasta la cornisa del edificio, es de sección octogonal irregular. A partir de la cornisa la torre se torna troncopiramidal. La torre se remata con una cornisa formada por mensulas sobre las que se asienta el balcón rematado por carpintería de madera en sustitución de la original de hierro.
La linterna fue sustituida en el año 1957 por una aeromarítima de La Maquinista Valenciana, así como la óptica original. Se electrificó en el año 1926.
La actual óptica se compone de un tambor con lentes dióptricos y catadióptricos con la particularidad de contar con un sector rojo cuya finalidad es señalizar los peligrosos bajos de Petón.
Sus características luminosas son de luz blanca, con la particularidad ya aludida de sector rojo, con ocultaciones cada 5 segundos.
Cuenta con una reserva energética con grupos electrógenos Diesel y completa sus instalaciones con Sirena eléctrica que emite la letra A en código Morse cada 30 segundos.
Tiene una altura de 40 metros sobre el nivel del mar y 15 metros sobre el terreno.
Posee un alcance óptico de 20 millas náuticas.
1884
Uso de lámparas eléctricas
A partir de 1884, comenzaron a utilizarse lámparas eléctricas en algunos pequeños faros franceses.